Los pimientos rojos asados son la típica cosa que puedes encontrar, y bastante buena, en cualquier supermercado. Pero desde que probé los que hacía mi tía Cristina, lentamente y un poco caramelizados, dejé de comprarlos. Son muy fáciles de hacer, y puedes utilizarlos para hacer unas ricas tartaletas de aperitivo, tomarlos en ensalada con ventresca y cebolleta, o de acompañamiento de carnes y pescados. Eso sí, en casa me dicen que son los pimientos más caros del mundo (¡se tiran horas en el horno!).
Pimientos rojos asados
INGREDIENTES:
- 2 pimientos rojos grandes
- Sal y aceite
COCINANDO:
- Quitar el culo de los pimientos y partirlos por la mitad, retirando todas las pepitas de su interior.
- Partirlos por la mitad y colocarlos hacia arriba en una fuente grande de horno.
- Echar un poco de sal y un pequeño chorro de aceite.
- Precalentar el horno a 160º con calor arriba y abajo.
- Meter la fuente a media altura y hornear durante dos o tres horas, hasta que la carne del pimiento esté blanda. Se puede hacer a mayor temperatura y en menos tiempo, pero a mí me gusta hacerlos lentamente para que se caramelicen más.
- Dar la vuelta a los pimientos cada cierto tiempo para que se asen por todos lados y no se queme ni por arriba ni por abajo.
- Cuando estén hechos, meter los pimientos en una bolsa de plástico cerrada y dejarlos allí unos minutos. Con el calor que se genera dentro de la bolsa la piel se despegará de la carne y será más fácil luego pelarlos.
- Sacar los pimientos de la bolsa e ir quitando la piel con las manos.
- Una vez pelados, con los propios dedos hacer tiras de los pimientos e ir poniéndolos en un tupper o cuenco profundo.
- Regar los pimientos con el jugo que han soltado los pimientos y que está en la fuente. Así se mantendrán jugosos durante días.
¡Hola Blanca!
Me encanta tu blog, sobre todo la detallada descripción de las recetas y la calidad de las fotos.
¡Seguro que vas a triunfar!
Yo, por mi parte, lo voy a difundir a todas las personas que conozco y les guste.
(Con respecto a la receta de los pimientos asados,
el tiempo empleado en el horno, sería más rentable asar el mayor n° de ellos, tantos como quepan en nuestro horno. En la zona más fría del refrigerador, y tapados convenientemente, se mantendrán perfectos varios dias. Y también se pueden congelar por raciones.
Según mi parecer, la mejor manera de aliñarlos es con: sal, ajo-opcional-, un poquito de vinagre y aceite de oliva virgen-todo al gusto-. Se pueden tomar calientes o en frío.
¡Son deliciosos como acompañamiento de cualquier plato!)
Muchísimas gracias Constanza, y gracias por los consejos. La verdad es que siempre intento hacer los máximos posibles, y quedan igual de bien aunque se tengan que amontonar un poco.