Creo que ya os he dicho en otra ocasión que las alcachofas son mis verduras favoritas. Cuando acaba el verano y vuelvo al día a día siempre pienso que lo bueno es que queda menos para la temporada de alcachofas. Hoy os traigo las alcachofas de mi padre. Simplemente guisadas con cebollita y el caldo de su cocción. Si son buenas alcachofas no tenéis fallo… y ¡no puede ser más sano! Opcionalmente puedes echarle al final unos tacos de jamón, ¡pero yo siempre he sido de la opinión de que las verduras son tan ricas que tienen que saber a lo que son!
Alcachofas guisadas
INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
- 10 alcachofas medianas (varía la cantidad en función de su tamaño)
- 2 cebollas
COCINANDO:
- Limpiar primero las alcachofas:
- Quitar las hojas hasta que el capullo central sea de color amarillo
- Cortar el tallo dejando 2 dedos desde la base y pelarlo
- Quitar la punta dejando sólo el capullo que es más bien amarillo
- Partir por la mitad (o en cuartos)
- Si son muy grandes y duros, quitar los pelitos centrales con una cuchara vacía melones (se puede usar una cuchara normal). Seguramente si son alcachofas muy frescas y buenas esto no te hará falta
- Ir dejando cada alcachofa a medida que están limpias en un bol con agua y un chorrito de limón para que no se oxiden y se pongan negras
- En una olla poner a hervir agua abundante con un par de pellizcos de sal. Cocer en ella las alcachofas hasta que se queden blandas (yo las dejo hasta que se puedan atravesar sin esfuerzo con un cuchillo afilado)
- Mientras tanto, picar la cebolla y pochar en una olla baja a fuego medio-bajo, hasta que se quede translucida y sin que llegue a tostarse. Añadir un poco de sal cuando ya haya empezado a pocharse.
- Cuando la cebolla esté lista, añadir una pequeña cucharada de harina y cocinarla durante un par de minutos subiendo el fuego y removiendo.
- Ir añadiendo poco a poco agua de la cocción de las alcachofas para hacer la salsa. Remover de vez en cuando o menear la olla con movimientos circulares como para hacer un pil pil, para así conseguir que la salsa coja un poco de textura espesa (¡sin pasarse!). Corregir el punto de sal si hace falta.
- Añadir las alcachofas cocidas y dejar unos 5 minutos cocinándose dentro de la salsa para que coja todo el sabor. Si la salsa espesa demasiado añadir un poco más de agua y seguir removiendo.
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